El pasado 6 de octubre, Ecuasol organizó su primer Encuentro de Madrinas y Padrinos, un espacio virtual de intercambio dedicado a quienes apoyan a nuestras niñas y niños día a día. Este momento clave, animado por el equipo de Ecuasol, reunió a una decena de participantes interesados en conocer mejor el impacto concreto de su padrinazgo y la vida del centro en Quito.

El encuentro inició con la intervención del fundador de Ecuasol, Jean-Christophe Crespel, quien recordó la misión de la ONG y las acciones que se llevan a cabo con las niñas y niños de los barrios del norte de Quito. A través de ejemplos concretos del día a día, compartió los avances del año, los logros alcanzados por los niños y los desafíos que el equipo continúa enfrentando.

Julie, voluntaria en Servicio Cívico en apoyo a la notoriedad y recién llegada de Quito, compartió un testimonio valioso que permitió ilustrar de manera muy concreta la realidad del trabajo en terreno. Se sumó también Marine, quien relató su experiencia como voluntaria junto a su hija durante el campamento de verano y que hoy es madrina, aportando así una mirada personal y comprometida sobre la labor de Ecuasol.

Dos participantes destacaron algunas líneas de mejora en nuestra comunicación. Expresaron su deseo de recibir más información cuantitativa y cualitativa, así como historias de éxito que permitan visualizar el impacto real del padrinazgo. También subrayaron la importancia de comprender mejor qué sucede con los jóvenes una vez que finalizan su proceso en la fundación y cómo se utilizan las contribuciones financieras después de su salida.

Otros temas enriquecieron el intercambio, entre ellos el proceso de selección de las familias, las fuentes de financiamiento complementarias al padrinazgo, el recorrido de los jóvenes después de su servicio cívico, así como la cuestión de la implicación financiera, incluso simbólica, de los padres y madres de los niños acompañados por Ecuasol.

Este primer encuentro confirmó la riqueza de estos espacios de conexión y la importancia de crear vínculos regulares entre las madrinas, los padrinos y el trabajo en terreno. A partir de este éxito, renovaremos este formato durante el primer semestre de 2026, con el objetivo de seguir fortaleciendo la relación entre cada padrino o madrina y el niño o la niña que acompaña.Un enorme agradecimiento a todas y todos por su participación, su compromiso y su confianza.
Juntos y juntas, hacemos crecer a Ecuasol.