


Un año más, la cena de Navidad de la fundación Ecuasol pudo realizarse gracias a la colecta navideña y a la generosidad de todas las personas que realizaron una donación. Queremos expresar un enorme agradecimiento a las y los donantes, sin quienes este momento tan esperado no habría sido posible.
La cena de Navidad reunió a las niñas y los niños de la fundación junto con todas sus familias, quienes fueron invitados a compartir este momento festivo. En total, más de 300 personas se dieron cita en la fundación para celebrar la Navidad juntas.
Fueron los padres y madres de los niños quienes se movilizaron para preparar todo el menú, en un hermoso espíritu de solidaridad y colaboración. Su compromiso fue clave para el éxito de esta jornada.
Más allá de la comida, diversas actividades y animaciones marcaron la celebración: una rifa, así como juegos y dinámicas para compartir entre grandes y chicos, permitieron crear un ambiente cálido, familiar e intergeneracional. Las risas, los intercambios y la buena energía estuvieron presentes durante toda la jornada.
Esta cena de Navidad ilustra perfectamente el impacto concreto de la colecta: ofrecer mucho más que una comida, un momento de alegría, encuentro y celebración para las niñas, los niños y sus familias.
Una vez más, gracias a todas las personas que contribuyeron a hacer de este día un recuerdo inolvidable para la comunidad Ecuasol.